Mal futuro.

Las necesidades básicas, la obesidad y el medio ambiente son los problemas más graves que se instalaron en el planeta en este siglo.

Necesidades básicas de un mundo que arrastra todas las faltas posibles. Hay pantallas planas pero no hay cloacas, ni agua potable, ni tanques de agua en viviendas, ni baños adecuados, ni lugares para cocinar de modo higiénico, ni salud, ni educación. El mundo no puede soslayar esta desgracia en la que millones de habitantes se encuentran encerrados sin salida ni pueden superar solos estas necesidades elementales.

La obesidad es una pandemia. La obesidad vinculada a la buena capacidad económica de alimentarse con comida chatarra o la obesidad vinculada a la pobreza. Obesos mal nutridos. Obesidad que choca frente a un mundo que también tiene millones de desnutridos haciendo visible la falta de racionalidad del ser humano.

El medio ambiente lo estamos destruyendo aceleradamente en un camino irreversible que hoy ya nos está pasando la cuenta. Abran los ojos, conecten la vista con el conocimiento.

Reaccionemos a tiempo. Es obligación de los que tienen la capacidad de discernir, evaluar estas cuestiones vitales y poder para lograr modificaciones en sentido positivo y en magnitud razonable. También es obligación nuestra en tener un mínimo de tiempo para advertir de estas catástrofes y tratar de aportar algo para modificar el rumbo. Todos deberán sacudir su propia modorra y hacer honor a alguna responsabilidad colectiva.

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